
En este mundo convulsionado y confuso vamos de visita a otros sitios y corriendo casi sin prestar mucha atención porque el tiempo apremia así sin pensar nos hacemos una idea de como es el dueño/a de casa.
Es solo imaginación de cada uno, no necesariamente la gente que leemos reune los defectos o virtudes que nosotros le asignamos.
Algunos atribuyen superpoderes a quienes solo son hombres y mujeres de bien que intentan vivir tranquilos y cuando les resulta posible, ayudan al prójimo.
Pero tienen dificultades como todos.
No se debe ir por ahí atacando, descalificando y maltratando a quienes no se unen a nuestras causas que por honrosas que sean, son nuestras.
Se invita y si el otro no acepta, resignarse, tendrá sus motivos.
Ni angeles ni demonios, ni genios ni tontos, somos individuos.
Mantengamos el microclima despejado que nos beneficia a todos.
Dedicado a N